La reendodoncia consiste en practicar una segunda endodoncia o tratamiento de conductos radiculares en una pieza. Este proceso se lleva a cabo para intentar evitar la extracción de un diente o una muela con una infección en su interior, en lo que, popularmente, se conoce como “nervio”. Es decir, en la pulpa dentaria. Pero ¿en qué situaciones se realiza y por qué es necesario volver a llevar a cabo este tratamiento?

En este artículo, desde nuestra clínica dental en Bilbao, te explicamos por qué puede fracasar una endodoncia y cuáles son los principales síntomas que pueden indicarnos que es necesario volver a tratar la pieza dental.

¿Por qué puede fracasar una endodoncia?

Ya sea como consecuencia de un traumatismo o una caries que ha avanzado hacia los tejidos internos de una pieza dental, la endodoncia permite tratar y eliminar la infección presente. De esta manera, consiste en la limpieza de los conductos y la extracción de la pulpa dentaria afectada, así como en la posterior obturación y reconstrucción de la pieza.

En algunas ocasiones, pocas, es posible que este tratamiento no consiga el objetivo de eliminar la infección del diente o de la muela. No obstante, su tasa de éxito es superior al 90% de los casos. Aun así, es importante tener en cuenta una serie de casos en los que la endodoncia puede fracasar:

Síntomas de que puedes necesitar una reendodoncia

Pero ¿cómo puedes saber si necesitas una reendodoncia? ¡Ten en cuenta los siguientes síntomas habituales!

 

Si tienes dudas sobre cuándo puedes necesitar una endodoncia, ¡consúltanos! Para ello, puedes ponerte en contacto con nosotros en los teléfonos 623 12 47 32 / 94 697 04 08 o dejándonos tus datos en el formulario de nuestra web.